Para ser Au Pair, hay que ser consciente de que es un compromiso de cada día. En efecto, los niños necesitan ser atendidos, comprensión, cariño pero también disciplina y firmeza. Con ellos, vivirás momentos de risa y de juego pero también tendrás que enfrentarte con lágrimas y caprichos. Hay que ser consciente de esto antes de comprometerse y ser capaz de asumirlo.

La familia debe darte tiempo libre para que puedas asistir a las clases que desees. Nosotros y/o tu familia te indicaremos los lugares a dónde ir para eso.

Usted debe tener hijos de más de un año, poner a disposición en su casa una habitación propia para alojar a su Au pair y darle, cada viernes, su paga. Hay que ser consciente de que su Au pair vivirá todos los días con usted, que formará parte de su vida y que compartirá los buenos y malos momentos con usted. Sea de mente abierta y acogedor, integre a su Au pair tratándole como un más en la familia.

Eso depende, hay dos posibilidades. O bien el Au pair no supera el límite máximo autorizado de horas del país y la familia tiene que encontrar otro medio de hacer cuidar a los niños (guardería, abuelos, etc…). O bien el Au pair hace más horas pero, en este caso, habrá que aumentarle la paga.